En el país de los sueños
El maestro solía tomar la siesta cada tarde. Un día, sus discípulos le preguntaron por qué lo hacía, y él les respondió: Voy al país de los sueños para encontrarme con los Sabios Antiguos y después transmitir sus enseñanzas a ustedes, mis discípulos.
Al día siguiente, los discípulos decidieron tomar la siesta, pero al maestro no le gustó y los regañó. Ellos se defendieron diciendo: Fuimos al país de los sueños para encontrarnos con los Sabios Antiguos.
Entonces el maestro les preguntó: ¿Y qué dijeron los Sabios?
Uno de los discípulos contestó: Les preguntamos si nuestro maestro venía por aquí todas las tardes, pero ellos nos dijeron que nunca habían visto a un tipo así.